Cuando hablamos de cubiertas planas o de baja pendiente, la morfología de estas conlleva muchas ventajas que hace de este tipo de estructuras las más recomendadas para construcciones de gran envergadura. En anteriores artículos hablamos de los beneficios hidráulicos y beneficios generales; en este escrito describiremos los principales beneficios ambientales de las cubiertas planas y sus ventajas frente a otro tipo de edificaciones.

El principal beneficio ambiental se refleja en el consumo energético aplicado en el acondicionamiento del edificio, ya que, al no necesitar una gran altura para su construcción, el volumen de aire que hay que mover para enfriar o calentar estas estructuras se reducen en un 30%, por ende, los sistemas especializados para este fin reducen sus especificaciones y se traducen en una menor carga energética.

Si a lo anterior le añadimos una impermeabilización especializada para este tipo de cubiertas, la mejor opción sería el TPO (Poliolefina termoplástica), este tipo de membrana ha tenido un crecimiento de instalación exponencial en los últimos años, ya que, gracias a su reforzamiento estructural combinado con la flexibilidad del caucho, crean una lámina flexible ideal para obras de todo tipo. Esta membrana no contiene plastificantes poliméricos, ni cloro, y es 100 % reciclable; es la única membrana actualmente disponible con una evaluación completa del ciclo de vida que cumple con ISO 14040 (Principios y marco de referencia regula la metodología de evaluación ambiental de análisis de ciclo de vida de un producto). Esto significa que no tiene un impacto ambiental en ningún momento entre su fabricación y su eliminación final. Adicional a esto, en blanco puede ayudar a maximizar la reflectividad de los sistemas solares fotovoltaicos.

No es de extrañar que, gracias a la morfología presente en las cubiertas planas, la accesibilidad de inspección y mantenimiento in situ se hace fácil gracias a su baja pendiente, esto permite a los operarios trabajar de manera segura y realizar las labores con protocolos y procedimientos reales, en donde su vida e integración física no se verán afectados por el diseño de la cubierta. Esta gran virtud la hace ideal para instalar sistemas fotovoltaicos o tubos solares, que ayudan a crear un ahorro energético importante y gracias a lo anotado con anterioridad, su mantenimiento se hace mucho más efectivo y por ende, la vida útil de estos sistemas se ve ampliada.

Los beneficios ambientales de las cubiertas planas son ampliamente conocidos y es una de las razones por las cuales muchos arquitectos y profesionales en Bioarquitectura eligen esta morfología para diseñar sus proyectos.